¿Cómo se vive en Zaragoza? ¿Cuál es nuestra calidad de vida? Aragón es la segunda comunidad autónoma con mejor calidad de vida según el Instituto Nacional de Estadística.
Aragón es la comunidad autónoma que más ha crecido en calidad de vida. Así lo indica el último estudio publicado en el Instituto Nacional de Estadística que nos sitúa en el segundo puesto. Teniendo en cuenta que estos son datos pre pandemia, vamos a repasar
los aspectos que definen nuestra calidad de vida y su relación con la vivienda.
Dentro de los indicadores que forman parte de este estudio están las
‘Condiciones materiales de vida’ que contemplan
la situación económica y financiera y el acceso a la vivienda. Aquí, sacamos nota porque
más del 54 por ciento de los hogares aragoneses tienen un alto nivel de satisfacción con su situación económica. Además, Aragón se presentaba como la tercera comunidad autónoma con gasto menos elevado en vivienda, tanto en alquiler como en propiedad. En general,
es a las mujeres que viven solas y son menores de 65 años, a quienes más cuesta la vivienda.
También en relación con la vivienda, en Aragón el 6,1 se consideran sobreocupadas, hay falta de espacio teniendo en cuenta el número de habitaciones por pareja o persona individual mayores de 17 años. El estudio afirma además que
más de 50.000 personas tienen dificultades para afrontar sus pagos de alquiler, hipoteca o suministros.
La elección de la vivienda, y lo que estamos dispuestos a pagar por ella, también se definen por la zona y los servicios que nos ofrece, así como por la calidad de vida del barrio concreto.
Vamos a repasar
otros aspectos concretos que determinan la calidad de vida en Zaragoza.
CONTAMINACIÓN ATMOSFÉRICA: En enero de este año, leíamos que
Zaragoza podría evitar en torno a 250 fallecimientos al año si redujera su nivel de contaminación. Este dato, obtenido del informe del Instituto Salud Global de Barcelona a partir de la emisión de partículas finas (PM2,5) y de dióxido de nitrógeno, nos avisa de que hay margen para la mejora en la calidad del aire de nuestra ciudad.
La recomendación de la OMS es de 10 PM2,5 de media y en Zaragoza, la media anual se encuentra en 15,5 PM1,5. En cuanto al dióxido de nitrógeno, la recomendación es de 40 ug/m3 y Zaragoza se encuentra con una media anual de 29,6 ug/m3.
CONTAMINACIÓN LUMÍNICA. Zaragoza es la
segunda ciudad española con mayor potencia total emitida, con 4.300 kw/km2. Sin embargo, la amplia extensión del término municipal, la alejan de ese segundo puesto en el ranking.
Desde 2019, cuando se publicaron estas cifras por parte de la Red española de estudios de Contaminación Lumínica, estos datos podrían haber variado porque se han instalado luminarias LED y las imágenes por satélite no pueden captar todo su impacto.
CONTAMINACIÓN ACÚSTICA. Aragón es una de las comunidades autónomas en las que
menos personas se ven afectadas por problemas de ruido, algo lógico si tenemos en cuenta la baja densidad de población en la mayor parte del territorio. El ruido, sin embargo, supone un problema de convivencia.
Las zonas de ocio nocturno son la principal causa de conflicto.
Mientras se aprueba la Ordenanza municipal contra la Contaminación acústica en Zaragoza y sin datos oficiales que nos permitan conocer la contaminación acústica de la ciudad, han surgido iniciativas como el “ruidómetro”, una aplicación que nos permite medir la intensidad del ruido y subir esta información a una plataforma que mapea el ruido en la ciudad. Esta iniciativa del
Observatorio de ciencia ciudadana en Zaragoza.
El límite permitido en el exterior hasta la fecha es de
65 decibelios por el día y 55 decibelios por la noche. En el interior, pasamos de los 40 db de día a los 27 permitidos por la noche. Pero ¿se cumplen estas medidas?
INFORMACIÓN A TIEMPO REAL. Algo que afecta mucho a nuestra calidad de vida es la calidad del aire y el nivel de polen en el ambiente, especialmente en primavera. En la web del Ayuntamiento de Zaragoza podemos comprobar a tiempo real los parámentros que nos permitirán saber en qué zonas de la ciudad repiraremos mejor.
Calidad del aire.
Niveles de polen.