El pasado mes de mayo, el Gobierno de Aragón publicó una Orden por la que se revisaban al alza los precios máximos de los módulos de vivienda de protección oficial. El objetivo no ha sido  otro que reactivar el mercado de este tipo de inmuebles al constituir, la vivienda, un bien básico para las personas. Sin embargo, este incremento puede llevar consigo una subida de los precios de la vivienda libre.

En los últimos años se había frenado la oferta de las viviendas de protección oficial por diferentes motivos:  el estancamiento de los precios de VPO desde el año 2009; la crisis financiera e inmobiliaria; dificultades en el acceso a la financiación y supresión de las ayudas cualificadas para la compra de este tipo de vivienda. Además, el incremento de los precios de materiales o mano de obra, no estaban haciendo rentable la construcción de este tipo de viviendas. 

Para tratar de frenar las consecuencias de esta situación sobre el mercado de vivienda protegida, el departamento de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda del Gobierno de Aragón, ha publicado la Orden de 17 de mayo de 2022, por la que se declaran los ámbitos territoriales de precio máximo superior de vivienda protegida  incrementado en torno al 21 por ciento el precio de la VPO en relación a 2009 cuando el precio del módulo básico en Aragón se estableció en 758 euros por metro cuadrado útil. 

El índice de precios se establece en función de tres factores: estructura del Sistema de Asentamientos de Aragón el Índice Sintético de Desarrollo Territorial y la población. En función de estos tres parámetros se han establecido tres grupos:

Grupo A, con las tres capitales de provincia, Zaragoza, Huesca y Teruel; Grupo B, municipios con precio medio superior a 1.500 euros el metro cuadrado: Barbastro, Jaca, Cuarte y Utebo y Grupo C, el resto de municipios aragoneses. 

Esta regulación que pretende ofrecer mayores garantías para el acceso a la vivienda podría tener consecuencias adversas en el mercado libre, que ya está sufriendo las consecuencias de las subidas de precios de los materiales, para la construcción, y de los tipos de interés para el acceso a la financiación.

El agente inmobiliario Adrián Botiza, miembro de Aportalia y director de AB inmobiliaria, es experto en el mercado inmobiliario de VPO y explica cómo los índices de referencia de este tipo de viviendas arrastran a todo el mercado inmobiliario a un alza de precios. “Cuando un piso de protección oficial salta a un precio de 155.000, un inmueble libre de las mismas características puede llegar a subir entre 90 y 100.000 euros”, explica Adrián Botiza. La diferencia puede ser incluso mayor en función de la zona en la que esté ubicado. 

“El precio VPO influencia sobre el mercado obra nueva y de segunda mano sobre pisos que no son de VPO. Si los primeros suben, los segundos tienden a revalorizarse en mayor medida”, afirma.

En cualquier caso, este experto considera que, al actualizarse los precios, se va a relanzar la oferta de vpo de segunda mano en los barrios del sur de Zaragoza y los precios tendrán tendencia a estabilizarse. 

¿En qué contexto se estaría produciendo esta subida de precios? En este momento el poder adquisitivo de las familias españolas y su capacidad de ahorro se están viendo muy mermadas con la subida de los precios de las gasolinas y los alimentos.

Con un incremento de la inflación hasta el 8,7 por ciento el pasado mes de mayo según datos del Instituto Nacional de Estadística, algunos de los pasos que se están dando por parte del Banco Central Europeo, es subir los tipos de interés para desincentivar el consumo y frenar la inflación. 

A un nivel local, en Zaragoza, el mercado inmobiliario se encuentra en un buen momento ya que los niveles de empleo son buenos y, aunque se haya reducido el índice del PIB, todavía se sienten los efectos del ahorro de la época covid que se están aplicando a la vivienda. Este mercado se encuentra en cifras récord.